¿Salvados con Luis?
Ya ha comenzado otro curso escolar y universitario, y también el curso político. En Granada se nos atraganta porque no hay ilusión, ni retos, ni futuro. En psicología, que no en morfopsicología, hablamos de “flow” cuando existe una conexión emocional entre los retos que se nos proponen y nuestros intereses. El “flow” de la Granada del PSOE era evidente, era la Granada que funcionaba y, por eso, la ciudadanía tenía ilusión, se implicaba y se contaba con ella para construir un modelo de ciudad participado que nos diferenciara de la Granada tradicional y rancia del legado Hurtado-Sebastián.
¿Salvados con Luis? No, está claro que no. Hoy nos encontramos con un alcalde atrincherado en el “divide y vencerás”, que se distancia de la ciudadanía tomando decisiones fruto de sus ensoñaciones que nada tienen que ver con las necesidades de Granada ni de la ciudadanía granadina. Y no es gratuita mi afirmación, solo hay que ver su forma de proceder: no da la cara tras sus primeros cien días de desgobierno; miente al que supuestamente iba a ser la otra mitad del 2+2; expulsa al Word Padel Tour, unos de los escaparates de Granada al mundo; ningunea a a la Mesa del Ferrocarril parapetado en que están “contaminados” políticamente y sin ideas propias. Y suma y sigue, o peor aún, resta y sigue.
Cómo añoramos aquellos tiempos en los que, con Paco Cuenca como alcalde, él mismo y el resto del grupo municipal estaban presentes en donde la ciudadanía les reclamaba. Esto es lo que le da sentido y razón de ser a la política municipal. Ser alcalde no es estar atrincherado en la Plaza del Carmen. ¿Alguien ha visto, por ejemplo, a Luis Salvador, a su media naranja o alguno de los 4+7 que conforman el equipo de gobierno actual, con los vecinos y vecinas de La Bobadilla tras las inundaciones de la pasada semana? ¿Alguien sabe en qué están después de los cien primeros días de desgobierno?
Es cuestión de estilos y aquí radica la gran diferencia. El primer día del curso político lo marcó Cuenca iniciando un Pacto Social por Granada, en el que el diálogo y la participación con los diferentes colectivos de la ciudad son la prioridad para seguir construyendo nuestra Granada. Porque frente a la distancia de unos, está la cercanía de Paco y su equipo. Porque frente al oscurantismo acostumbrado de Sebastián Pérez, añadido al de Luis que de nada nos salva, está la transparencia y frescura de un equipo de gobierno, el socialista, que salió muy reforzado de su gestión en los tres años de mandato, siendo la fuerza más votada con 36001 votos. Y es este estilo el que sigue imperando en el actual grupo municipal socialista, ahora en la oposición. Presente en cada barrio desde el primer día de su nuevo rol en el Ayuntamiento de Granada, porque el PSOE de Paco Cuenca no está pendiente de sillones y proyectos personales, y sí en los problemas de Granada, tu Granada.
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