jueves 18 abril
Opinión  |   |

Urbanismo, patriarcado, explotación Insostenible

Las Gabias era, antes de la fiebre urbanística irresponsable, un municipio encantador. Con sus casas blancas bajas, con sus patios, sus corrales y sus huertos. Con eras, acequias y arboledas. Con mucho espacio. Con una riqueza patrimonial importante del que ya apenas quedan un puñado de casas que debieran ser catalogadas BIC para su preservación, pero que dudamos que sea así por la voracidad inmobiliaria que vive el municipio desde que se dio el pistoletazo de salida a la aniquilación del territorio, de la vida sostenible y de la calidad ambiental.

Hasta la gran explosión urbanística, Las Gabias era una población consolidada durante décadas en los 4.000-5.000 habitantes. Ahora, tras un par de décadas de políticas urbanísticas irresponsables, rayamos ya los 21.000 habitantes.

No hay que ser muy experto o experta en el tema para saber que una política del suelo ineficaz y explotadora del territorio y las personas, que propició la construcción masiva de viviendas de mala calidad, provocó el colapso social y ambiental que sufre hoy Las Gabias. Diferentes gobiernos locales del PSOE de Las Gabias animaron, propiciaron y auspiciaron que se urbanizara de manera brutal, sin tener en cuenta el gran incremento poblacional que iba a sufrir el municipio, sin incrementar y garantizar servicios esenciales como limpieza, mantenimiento o policía local. Y no sólo esto, sino que la misma estructura urbanística, en ese afán explotador típico del capitalismo patriarcal, fue la de construir al límite, sin planificar amplias zonas verdes, sin aceras transitables, sin proveer espacios donde compartir la vida vecinal, donde se pueda jugar, charlar, leer, pasear o “perder el tiempo” viendo la vida pasar junto a otros vecinos y vecinas. La voracidad explotadora que fue planificada y alentada desde el PSOE de Las Gabias, que gobernaba y sigue gobernando la localidad, ha arrasado con la posibilidad de un municipio sostenible a nivel energético, material y vital.

Hemos pasado, víctimas del sinsentido explotador e irresponsable, de un municipio amable, añorado por los vecinos y vecinas, a uno donde no hay PGOU por los excesos urbanísticos, donde la carencia de masa forestal es notable y donde apenas hay espacio público, metros cuadrados por habitante donde esparcir los cuerpos, donde correr, jugar, disfrutar de la vida compartida con las demás personas.

Patriarcado. Urbanismo. ¿Se relacionan? Por supuesto. Dejar construir hasta el límite de lo legal, dejando el mínimo espacio a las personas es patriarcado. Si los gobernantes del PSOE de Las Gabias, que planificaron y firmaron los planes parciales y la política urbanística de Las Gabias, hubieran sido hombres, padres y cuidadores seguramente hubieran dejado espacio libre y recursos a esas actividades tan vitales, tan básicas para la vida humana y tan olvidadas. Hubieran tenido en cuenta los carritos y capazos, hubieran tenido en cuenta que los niños y niñas, y adultos, necesitan jugar, esa actividad sagrada de donde todo parte. Y para jugar, inventar, cocrear, compartir, convivir, discutir se necesitan espacios amables, silenciosos, con protección vegetal, frescos en verano. Esto nunca estuvo en la mente de los urbanistas aficionados que nos dejaron y nos siguen dejando espacios sucios, cutres, pequeños y agresivos que no invitan a nada más que a sobrevivir. Eso quien ha criado, cuidado, amamantado y jugado lo hubiera sabido y lo hubiera tenido en cuenta, porque aspira no a sobrevivir, sino a vivir, y vivir bien y con calidad. Calidad de vida lo llaman ahora.

Los intangibles. Lo intangible provoca efectos, pero no es material. Son cuidados esenciales de una sociedad, que los gobernantes del PSOE de Las Gabias tampoco tuvieron en mente. Cuidados como limpieza, mantenimiento, jardinería, regados de plantas, embellecimiento de parques, calles y plazas, acondicionamiento de espacios para dar sombra, seguridad o confort para que en ellos se juegue, se cree, se viva bien. ¿Por qué no se ha invertido en esto? Porque en la mente de quien tuvo la posibilidad de hacerlo no estaban esas necesidades. Porque esas mentes patriarcales estaban fijadas en la explotación, extracción, no en cuidar y preservar la vida. Quien no cuida no sabe cuidar.

Muchas necesidades para una vida buena son ya difíciles de conseguir. Se perdió la oportunidad. La vida, el paso del tiempo es un proceso irreversible. Eso no va a volver en un tiempo humano. Quizá sí en un tiempo geológico. Pero hay otras cuestiones que sí se pueden enmendar. Las hemos ido repitiendo constantemente. Son cuestiones 'transideológicas', preideológicas y que todo partido político y toda opción ideológica debiera tener en cuenta: la buena vida, en mayúsculas. Buena vida. Los cuidados. La preservación de la vida, la seguridad ambiental de las nuevas generaciones y unas nuevas gafas, feministas y sostenibles, para ver el mundo como un sitio de creación, cuidado, libertad y posibilidades de belleza, y no como un lugar a explotar y extraer.

Luciano Illanes
Concejal de Ahora Sí Podemos Las Gabias

Publicidad

Comentarios

©Queda totalmente prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta noticia sin autorización expresa de la dirección de ahoraGranada
Publicidad
DÍA A DÍA
Desarrollado por Neobrand
https://ahgr.es/?p=110680