Investigado "un conocido delincuente" en un pueblo de Granada por vandalismo y por daños en una casa
El hombre de 47 años fue detenido en marzo por tres delitos de robo con fuerza perpetrados en dos viviendas y en un bar, hechos que "ya generaron alarma social"
La Guardia civil ha investigado a "un conocido delincuente" de la localidad de Cáñar, de 47 años, como presunto autor de un delito de daños en una vivienda y por actos de vandalismo.
La investigación se produjo después de que el pasado 4 de abril un vecino de Cáñar denunciara en el cuartel de la Guardia Civil de Órgiva que durante dos noches sucesivas habían provocado daños en su vivienda, según ha informado el Instituto Armado en una nota de prensa.
La primera noche el presunto autor rompió el cristal y la persiana de una ventana, pero no pudo entrar porque no pudo arrancar la reja. Esa misma noche también destrozó el cuadro de luz de la fachada. A la noche siguiente, rompió la cerradura de la cancela de hierro de entrada, y tampoco pudo acceder al interior de la casa.
Por otra parte, el alcalde del municipio de Cáñar denunció ante la Guardia Civil que el ahora investigado llevaba varios días causando destrozos en el mobiliario urbano y en los jardines del pueblo donde cortó con una hoz una palmera y un olivo. También selló con silicona las cerraduras de las puertas de algunas viviendas que dan a la plaza.
La Guardia Civil de Órgiva abrió una investigación y los agentes encargados han localizado unas imágenes grabadas por unas cámaras de seguridad en las que se ve a este "conocido delincuente" intentando acceder a la vivienda del primer denunciante, cómo echaba silicona en las cerraduras y cómo destrozaba la palmera y el olivo, por lo que ha sido investigado.
Este hombre fue detenido por la Guardia Civil el pasado 24 de marzo como presunto autor de tres delitos de robo con fuerza perpetrados en dos viviendas y en un bar de este mismo municipio, hechos que ya generaron cierta alarma social en la localidad.
El detenido intentó acceder al interior de un bar forzando la puerta de entrada, pero al no conseguirlo sustrajo las seis mesas que el propietario tenía en la terraza.
Los otros dos robos ocurrieron en sendos cortijos del municipio, en los que presuntamente robó un tonel de vino, una caja de herramientas caseras, 20 botes de aceitunas aliñadas y ocho jaulas de pájaros en el primero; y aperos para caballerías valorados en aproximadamente 2.500 euros en el segundo.
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