Peligros impulsa un aula para asistir a los menores expulsados de centros educativos
Dos pedagogos de la Asociación CREA dirigen la iniciativa, a la que los niños son derivados tras pasar por Servicios Sociales
Desde el inicio de este curso escolar las concejalías de Bienestar Social y de Educación del Ayuntamiento de Peligros mantienen un aula que presta apoyo a usuarios de Servicios Sociales y a estudiantes que han sido expulsados de los centros educativos.
El alcalde de la localidad metropolitana, Roberto García; la concejala de Bienestar Social, Cristina López Núñez, y la de Educación, Sandra Salas, han presentado el aula socioeducativa junto a los pedagogos de la misma, Nadia Hidalgo y David López.
El servicio se presta en el Edificio de Talleres Don Agustín. Por las mañanas está dirigido a estudiantes que han sido expulsados del instituto, con actividades orientadas a reconocer las conductas que han llevado a esta circunstancia, refuerzo de materias u orientación académica y profesional. Por las tardes se dirige a niños de Primaria con problemas socioeducativos, actuando como refuerzo escolar, con talleres dirigidos al aprendizaje de valores, actividades lúdicas y refuerzo de materias de manera personalizada.
El Ayuntamiento de Peligros cuenta con la colaboración de la Asociación CREA, una entidad sin ánimo de lucro que ofrece servicios de bienestar social. Con el aula ‘Ikigai’ quieren ofrecer ayuda a menores que presentan alguna dificultad derivada de su situación personal o ambiental.
“Desde el Ayuntamiento estamos orgullosos de contar con una asociación como CREA, que nos permite articular este servicio, novedoso pero necesario, pensado para los menores en situación de exclusión social o en riesgo de estarlo”, ha explicado el alcalde.
Derivados por Servicios Sociales
Es el Área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Peligros la que deriva a los niños que necesitan la atención del aula socioeducativa o del de participación educativa. El proceso se lleva a cabo en todo momento coordinado con Educación.
Hasta el momento este servicio ha atendido a 16 usuarios en el aula socioeducativa y 8 en el aula de participación educativa.
“Nuestra labor consiste en ofrecer actividades dirigidas al aprendizaje de conductas positivas, sanas y socialmente adecuadas”, ha explicado López antes de indicar que trabajan "el buen comportamiento, el respeto a otras personas y a uno mismo y la motivación hacia el estudio y el desarrollo personal y profesional".
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