Un proyecto participativo de la UGR persigue mejoras ambientales en los bosques de Granada
El próximo 3 de diciembre tendrá lugar la primera jornada de plantación en Lancha del Genil
El 'Bosque Granatensis' comienza su andadura. La alianza público-privada que se ha consolidado con la constitución de la cátedra de la Universidad de Granada La Huella Verde, a raíz de un movimiento empresarial y ciudadano cada vez más sólido y transversal, continúa su hoja de ruta en torno a la sostenibilidad con proyectos tangibles de carácter medioambiental como la reforestación y un enfoque solidario y colaborativo.
La primera gran cita se ha programado para el 3 de diciembre. En concreto, la convocatoria persigue realizar una serie de mejoras ambientales del Sumidero de Lancha de Genil, impulsado por la Asociación La Huella Verde, y que forma parte del Anillo Verde que se está creando en Granada.
La iniciativa busca expandir la reforestación ya iniciada, incrementando la densidad de plantas y, sobre todo, su diversidad con el objetivo de lograr un bosque mediterráneo. Además, se pretende abordar otros aspectos clave para la mejora del ecosistema como la restauración de suelos, el fortalecimiento de poblaciones animales y la lucha contra la contaminación ambiental, conocida como 'basuraleza'.
Un aspecto fundamental de este proyecto es su carácter participativo. La intención es que esta restauración ambiental sea un esfuerzo colectivo, un bosque creado por y para la comunidad.
También quiere ser un 'bosque educativo' y se pretende que el proceso de creación de este espacio sirva de herramienta para la sensibilización ambiental de las personas que participen en su creación, pero también de la sociedad en general y, especialmente, a la comunidad universitaria. Se concibe como un aula abierta para formación y un laboratorio de experiencias diversas de la propia universidad sobre temas sociales, educativos o ambientales.
Por último, el proyecto busca establecer vínculos y un sentimiento de pertenencia entre la comunidad universitaria, el voluntariado, la población local (especialmente del barrio) y el bosque. Se plantea consolidar como estrategia de conservación de los entornos naturales periurbanos, ayudando a fomentar un uso y disfrute sostenibles y una mejor integración entre lo urbano y lo natural.
Dentro del marco de este proyecto, se llevarán a cabo diversas jornadas de voluntariado con diferentes enfoques y objetivos. Estarán destinadas principalmente a la plantación de árboles, aunque también se abordarán otras tareas ambientales en jornadas temáticas como pueden ser de mantenimiento y riego, la realización de actuaciones hacia la fauna o que afronten algún problema ambiental concreto.
También puede realizarse jornadas que tengan unos objetivos más educativos, formativos o sociales. Todo ello orientado a ser un aula abierta y experiencia y ya sea orientado a toda la comunidad universitaria o enfocado a algún colectivo concreto dentro de la institución académica.
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