Inaceptable
Que el servicio público de salud de Andalucía está hecho trizas es un hecho irrebatible, dadas sus profundas deficiencias y debilidades por la falta estructural en todos los niveles de las categorías profesionales que lo conforman, a lo que hay que añadir el abrumador déficit de medios y la falta de inversiones suficientes en el sistema sanitario, provocando todo ello que la sanidad pública andaluza deje de ser la joya de la corona, de lo que ya se encargó bastante los sucesivos gobiernos del PSOE, política que ha continuado el actual gobierno de coalición compuesto por el PP y Ciudadanos, con el apoyo expreso de los fascistas de VOX.
Esas políticas de destrucción de la sanidad pública andaluza están incidiendo claramente en la atención primaria, que es un barco insignia del sistema que queda herido en su línea de flotación, a lo que hay que añadir el desgobierno y la falta de planificación, que es lo que identifica la actual política sanitaria del actual gobierno en Andalucía. Es este por qué de las personas andaluzas que se han manifestado masivamente reclamando soluciones inmediatas y no los parches que se han ideado, recurrentemente, por la Consejería de Salud con medidas como la de doblar turno que, en absoluto, va a paliar la pérdida de accesibilidad a la sanidad pública, las grandes colas y las grandes listas de espera en los centros de salud.
A todo esto, hay que sumar que cada vez son más los médicos que piden certificados para poder trabajar en el extranjero en busca de mejores oportunidades de trabajo, según se ha publicado recientemente, esto es, migrar a otros países del espacio europeo e internacional donde encuentran mejor reconocimiento profesional, dada la alta calidad de nuestro personal facultativo y sanitario y, por supuesto, mejores condiciones laborales. En Granada la salida de médicos del servicio andaluz de salud alcanza ya la cifra del centenar, lo que implica más deterioro profesional y más empeoramiento en la asistencia sanitaria, especialmente en lo que se refiere a la medicina de familia, pero también a las especialidades de Oftalmología, Anestesiología y Reanimación y Pediatría.
Es por ello, que es preciso establecer un plan de reactivación de la sanidad andaluza, que pasa por la necesidad de implementar de una serie de medidas estructurales de fortalecimiento de sistema público, tales como, el aumentar la plantilla de médicos especialistas y personal sanitario, sobre todo en atención primaria y en los hospitales, junto a una política sanitaria centrada en el mejora profesional, como por ejemplo aumentando la formación especializada, mejorando, por tanto, la calidad del servicio y las condiciones laborales de los profesionales de la sanidad pública, para ello es imprescindible, como ya han reiterado las organizaciones sindicales y las profesionales, la adecuación del trabajo de los médicos de familia y de pediatras, recuperando el prestigio de la Atención Primaria y a sus profesionales, lo que ayudará a fidelizar a las personas médicas residentes de Medicina de Familia cuando finalizan su formación MIR y por supuesto mejorar las plantillas de las urgencias de los hospitales, no solo con el suficiente personal, también, desarrollando un sistema organizativo adecuado, eficaz y eficiente. Lo de la tele consulta está bien para determinados casos y solo como medida complementaria, pero, en ningún caso, debe sustituir la relación médico-paciente.
Todavía retumban en los oídos las promesas que desde el PP se hicieron a las personas andaluzas y que iban a poner en marcha en cuanto llegaran al gobierno de la Junta de Andalucía y así dijo, su actual presidente que, para "evitar el éxodo de talento y capital humano a otras comunidades autónomas… había que revisar los salarios para dignificarlos y equipararlos con la media española", y aseguró que “en tres años podría alcanzarse la media retributiva nacional si se tomaban medidas como pasar parte del complemento de rendimiento personal a la nómina, reactivar el proceso de la carrera profesional y modificar los conceptos retributivos”. Pues bien, han llegado al gobierno, han pasado los tres años, se van a convocar nuevas elecciones y las cosas van a peor, pues la desigualdad salarial sigue aumentando respecto de otras comunidades autónomas, la fuga de personal facultativo y sanitario es abrumadora y la Atención Primaria ha colapsado.
Por el contrario, el Servicio Andaluz de Salud ha aumentado en más del 40% el presupuesto destinado a servicios del sector privado. Ahí está el verdadero plan y el negocio que fomenta el gobierno andaluz, lo que afecta, directamente, a la igualdad y accesibilidad a la prestación de este servicio esencial a la población. Inaceptable.
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