¿Oiga? (Tarjetas B) (30-1-2015)
Tarjetas B
Tarjetas opacas. Tarjetas oscuras. Tarjetas negras. Tarjetas B. Tarjetas de delincuentes con corbatas de seda natural, ternos de paño inglés y antifaces empresariales, políticos y sindicalistas. Pensemos y sopesemos, por un momento sin demasiada lucidez, aunque con la convicción perenne de ser demócratas incuestionables, que a esos individuos que presuntamente se han llevado el dinero público con las tarjetas B, se les diese el adiós definitivo, una vez encontrados culpables, públicamente para ejemplo de lo que nunca se debe de hacer con el dinero público. Y no comulgamos con la pena de muerte. Oiga: ¿Nos llamarían bárbaros, autoritarios, asesinos, dictatoriales y autócratas si los ajusticiamos? Sí. Así nos llamarían. Y ya que en nuestro Estado Social de Derecho actual, la pena de muerte no está contemplada constitucionalmente. Las cosas… Oiga: ¿Y nos llaman idiotas o memos con lo que no les va a ocurrir a estos presuntos delincuentes de las tarjetas B de Caja Madrid? Escribo lo de idiotas y memos, porque somos todos los españoles los que pagamos los 21.000 millones de euros con los que se rescató a Caja Madrid. Estamos seguros, que estos delincuentes, siempre presuntos, se van a ir de rositas, o con unas condenas irrisorias por insignificantes. La Ley no es igual para todos. Y lo constatamos a diario. Reformas y no revoluciones. No sé, no sé, no sé…