Salvar a Moreno Bonilla
“¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia?” De esta manera de dirigió Marco Tulio Cicerón a su enemigo político, Lucio Sergio Catilina, en el Senado romano, allá por el año 63 antes de nuestra era. Y es imposible resistirse a usar la misma frase, pero cambiando una sola letra, la que separa al patricio romano del concejal de Urbanismo de la ciudad de Granada, Enrique Catalina. Y solo les separa eso, una letra, porque la actitud es exactamente la misma, tal y como evidenció el pasado viernes durante la celebración del pleno ordinario del Ayuntamiento de Granada. Porque la arrogancia patricia de quien se cree estar por encima del bien y del mal forma parte de la poquísima gestión política del área de Urbanismo en este mandato.
Partamos de una primera idea que vale para todo el PP de Granada: la máxima principal de trabajo para Carazo y compañía no es el interés general de la ciudad, sino proteger, por encima de todo a Moreno Bonilla que es quien de verdad manda en la Plaza del Carmen. Vamos con dos ejemplos.
Resulta que para el señor Catalina hablar de la protección del Valle del Darro o de los cortes de luz en los barrios del distrito Norte de la capital es algo “artificioso”. Y no lo decimos nosotros. Nos limitamos a citar textualmente la expresión que salió de su boca cuando le tocó defender las iniciativas del PSOE de la ciudad en el pasado pleno y que fueron las que lo mantuvieron con vida a pesar de haber nacido muerto por la incapacidad de Carazo y compañía.
Catalina, que colidera junto a la alcaldesa la idea de colocarnos un nuevo centro comercial en la Vega, en los terrenos que ocupaba la antigua piscina Miami, considera “artificioso” que nos preocupe la protección de un entorno como el Valle del Darro, único y excepcional, cuando ni él ni Carazo han renunciado expresamente al famoso cierre del anillo, cuya sombra planea por un entorno demasiado extenso impulsada por colmillos sedientos de ladrillo. Para Catalina es “artificioso” que nos inquiete sobremanera que, por mucha protección que otorgue la incoación del expediente para su declaración como BIC por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, la culminación de este proceso se eternice durante años sin que se vea la luz al final del túnel.
Y siendo esto grave, lo es mucho más que Catalina, en nombre de Carazo, considere “artificioso” que el PSOE intente que la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA) comparezca en las sesiones de la Junta Municipal de Distrito Norte, cuyos barrios están más afectados que ningún otro, por los salvajes cortes de luz que ENDESA es incapaz de solucionar a pesar de los años transcurridos con este problema. En el mandato anterior se intentó lo mismo con nulo éxito. Ahora, con un periodo político municipal recién comenzado se ha intentado lo mismo, pero para Carazo y Catalina es algo “artificioso”. Todo sea para que el líder supremo, Moreno Bonilla, como decíamos más arriba, mantenga su traje limpio en Granada y siga sin dar la cara por la lamentable gestión de la Junta de Andalucía en nuestra provincia desde hace 5 años.
Que un responsable público tilde de “artificioso” el debate sobre dos asuntos tan importantes en la ciudad y que son avalados por tantas personas y colectivos movilizados por cada uno de ellos, evidencia la desconexión total de un gobierno tan dormido como inexistente, que prefiere hacerlo todo por la puerta de atrás, incluso salir y entrar del Ayuntamiento, tal y como hace Carazo a diario en la Plaza del Carmen, no sea que por dar la cara, alguien le pueda sacar los colores de toda la gama cromática de la desvergüenza.
