lunes 29 abril
Opinión  |   |

Un barrio llamado Zaidín

El Zaidín es un barrio situado al sur de la ciudad y es el más poblado. Está conformado por las antiguas barriadas de Casillas Bajas, Santa Adela, Santa Rosalía, Vergeles, Madrigales, La Cruzada, comandante Valdez, Ciudad Jardín, Divina Infantita, Parque de las Infantas y por las recientes de Cruz de Lagos, Palacio de Deportes y Campus de la Salud. Está entre dos ríos, el Genil y el Monachil, por eso se le conoce como “tierra entre ríos”, de ahí su nombre que data del término árabe Saedin y desde su nacimiento es un barrio obrero de gente humilde y trabajadora. Su asociacionismo vecinal constituye un punto de encuentro de donde han partido importantes iniciativas para construir un barrio para todos.

Es gente amable, cálida y solidaria la que habita ahí, orgullosa de sus orígenes. Cuando preguntas cuáles son sus preocupaciones señalan que una de ellas es la protección ambiental. En este sentido no llegan a entender el abandono de la autoridad local de zonas emblemáticas como la de “las columnas” donde no se invierte ni en limpieza, ni en mantenimiento, así el asfaltado está dejado a su suerte y la suciedad se acumula. O, el cauce del río Monachil a su paso por Campus de la Salud-Zaidín está con copiosa maleza lo que puede provocar daños importantes por inundaciones por precipitaciones meteorológicas.

El comercio local es otro de los asuntos principales que ocupan especial atención de la población zaidinera, especialmente perjudicado por la actividad extractiva que desarrollan las grandes superficies, atrayendo a la gente a sus instalaciones donde pasan todo el día en un mal entendido ocio, desarrollando una competencia brutal y despiadada que provoca el vaciamiento de los comercios del barrio. El decreto de liberalización total del horario comercial de la alcaldesa de Granada por su paso por la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía afecta sobremanera al Zaidín en el que el pequeño comercio es nuclear para su economía. El sistema impuesto está destruyendo el tejido empresarial del barrio, precarizando el empleo que aboca, así mismo, a las personas trabajadoras a una suerte de esclavitud, obligándolas a trabajar en domingos y festivos, con los perjuicios que ello conlleva para la conciliación familiar.

El acceso a la vivienda, especialmente para la gente joven, es cuestión principal en el barrio. Los precios de los alquileres son muy elevados y las viviendas que se ofertan no están bien acondicionadas. La zona del PTS, literalmente es inaccesible para una economía trabajadora, lo que está provocando el vaciamiento del barrio hacia pueblos cercanos con precios más asequibles, dándose, además, la circunstancia que se ha instalado el alquiler especulativo para estudiantes lo que genera dinámicas de urbe vaporosa y, a su consecuencia, se impone el desarraigo y se pierde la identidad de vecino del barrio. Las zonas ajardinadas brillan por su ausencia, lo que nos lleva a que el asfalto está sustituyendo a los árboles. Los niños y los adolescentes no tienen espacios públicos donde jugar, convivir, disfrutar. El barrio debe revitalizarse, rejuvenecerse y que no haya suficientes guarderías públicas no ayuda para nada.

Cuando preguntas a los vecinos del barrio sobre la movilidad y el transporte público vienen a decir que es como el cuento de nunca acabar y que hasta ahora no ha habido gobierno municipal que haya atendido una reforma integral sostenible a modo de circuito circular entre las arterias principales del barrio y que acabe con las barreras arquitectónicas. Tener una visión de conjunto y transversal es lo que permitiría hacer barrio para todos.

De momento, nuestro gobierno municipal está en otra cosa, a ver si nos lo explica y nos vamos enterando. Esta más en el spot publicitario que en las necesidades de los barrios de Granada.

Publicidad
©Queda totalmente prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta noticia sin autorización expresa de la dirección de ahoraGranada
Columnista
Salvador Soler

Publicidad
DÍA A DÍA
Desarrollado por Neobrand
https://ahgr.es/?p=247351