martes 19 marzo
SEMANA SANTA 2021  |   |

"Creo que tarde o temprano la ciudad agradecerá el esfuerzo y sacrificio de las hermandades"

Jesús Muros reconoce que lo más duro es volver a quedarse sin pasos en las calles, si bien admite que las corporaciones no han dejado de trabajar ante la situación generada por la pandemia

Por segundo año consecutivo después de 80 años, las hermandades no podrán sacar sus pasos a las calles. Las cofradías de Granada viven la Semana Santa adaptándose a las circunstancias generadas por la pandemia y aunque queda el sabor agrio de que no haya procesiones al menos este año sí hay actos con los que se palia un poco el deseo de recobrar la normalidad.

Mientras tanto, las corporaciones nazarenas granadinas están entregadas a un día a día que vuelve a traer una crisis económica, algo por lo que han pasado recientemente y que les hace volver a entregarse. El presidente de la Federación de Cofradías, Jesús Muros, así lo destaca en esta entrevista antes del inicio de la Semana Santa de 2021.

Pregunta.- ¿Cómo viven las cofradías granadinas la Semana Santa de 2021, la segunda sin pasos en la calle?

Respuesta.- Es diferente al año pasado, cuando estábamos confinados. Este año nos permite que celebremos nuestros actos de Cuaresma, triduos, quinarios, carteles o vía crucis. A lo largo de Semana Santa se harán una serie de actos conjuntos de algunas hermandades y otras tendrán actos especiales el día que hacen sus estaciones de penitencia. Se está viviendo de una manera dentro de los templos en lugar de la calle.

P.- ¿Quizás sea el momento de estar cerca de las hermandades?

R.- Indiscutiblemente. Hay que aprovechar para estar pegados a la hermandad.

P.- ¿Qué está siendo lo más agrio de esta situación?

R.- No poder hacer la estación de penitencia. Eso está siendo lo más duro, estar en el templo y no poder estar en el contacto con los hermanos previos a una salida.

P.- ¿Y lo más reconfortante?

R.- El contacto que estamos teniendo con los hermanos que se nos están acercando a los templos, están viniendo con nosotros, está siendo reconfortante dentro de la situación tan dolorosa que estamos viviendo.

P.- Está siendo una situación compleja también para las hermandades, que están perdiendo hermanos por la pandemia.

R.- Sí, todos en algún momento hemos perdido algún hermano en esta situación y tenemos hermanos enfermos y hospitalizados. Eso pesa mucho en el ánimo.

P.- Vuelve el escenario de crisis económica, en el que se muestra la cara más solidaria de las hermandades, ¿se ve, de nuevo, el lado más solidario de las hermandades?

R.- Efectivamente. Desde el primer momento, en cuanto que surgió el tema no hubo ni que pedirle a las hermandades, que desde el primer día del estado de alerta ahí estaban. Primero fue colaborando con las mascarillas y distribuirlas a todo el mundo o ropa de protección. Luego lo que se ha hecho desde las bolsas de caridad para dar auxilios a todos los hermanos que lo están pasando mal. Ahí han estado las hermandades, a pulmón y sacando fuerzas y dinero de donde no lo había. Esto ha sido un palo para las hermandades. No salir a la calle es dejar de recibir unas tarjetas de sitio. Ha sido una pérdida económica importante y un gasto que se ha elevado con las bolsas de caridad.

P.- ¿Cómo se va a recordar esta etapa en las hermandades en unos años?

R.- Habrá un doble recuerdo, el triste y penoso de no haber podido hacer estación de penitencia pero será un segundo lugar. El más importante será la muestra de solidaridad que han demostrado las hermandades, hombro con hombro que han puesto sin distinción. Todos a una trabajando. Creo que tarde o temprano la ciudad y las instituciones en algún momento agradecerán a las hermandades el esfuerzo y el sacrificio que están haciendo en pro de la ciudad, porque se echa una mano indistintamente de quien la pida.

P.- ¿Volverá la Semana Santa como la conocíamos?

R.- Espero y deseo que sí, que vamos a volver a tener una Semana Santa plena, siempre se tendrá en cuenta todas estas circunstancias vividas. Espero que pronto recobremos nuestra semana de pasión habitual como la hemos conocido en años anteriores.

P.- ¿Cómo se sienten por parte de todas las instituciones y su respaldo?

R.- Por parte de Diputación de Granada prácticamente nada. Se limitan en los últimos años a hacer una guía de horarios e itinerarios que como no ha habido pasos en las calles no ha elaborado ninguna. Por parte de la Junta de Andalucía estamos pendientes de que se publique en el BOJA las ayudas anunciadas por el presidente. Llevamos dos años con unas ayudas al patrimonio que en Granada la cofradía de la Aurora va a restaurar la capilla de San Miguel, que debido a la humedad ha perdido la policromía; Los Favores restaurará la Virgen de la Paz o el crucificado de la Iglesia de San Andrés. Esas son ayudas de la Junta y que algo ayudan. Ahora parece que el otro día anunció el presidente unas ayudas con unas subvenciones para realizaciones.

El Ayuntamiento de Granada nos llevamos la triste sorpresa de que el convenio se rebajó a 63.000 euros, parece que hay voluntad de recuperar lo perdido y este año el convenio se eleve a los 75.000 euros otra vez. Nos han dicho que en principio volvemos a la misma cantidad, vamos a ver cómo recuperamos esos 12.000 que nos dejaron el año pasado.

P.- De los hosteleros, ¿ni están ni se le esperan?

R.- Ellos alegan que todos los comercios y bares no están asociados a la Federación de Hostelería y por tanto no pueden colaborar con alguna cantidad significativa, tienen un pequeño apoyo pero prácticamente como una pequeña cantidad en la que algunos años colaboran, pero nada más. No conseguimos de hostelería nada, no solo aquí, en toda Andalucía. Nosotros pedimos y ya está. Nuestro fundamental eje es dar testimonio de fe en la calle y no vamos en ningún momento a decir que si no nos dan no salimos. No sería razonable ni formaría parte de nuestro ADN católico.

P.- ¿Ha sido esta una de las cuaresmas más difíciles?

R.- Sí. No es lo mismo los problemas habituales que puedan surgir cuando estamos con la actividad normal que de pronto estar sin abrir la sede, sin contacto directo con los hermanos mayores, no poder reunirnos. Ha sido una situación dificilísima que se produce al final de mi mandato. El año que viene se convocan elecciones y yo ya estoy de retirada, es mi penúltima Semana Santa.

P.- ¿Repetiría si pudiera?

R.- No, ni mucho menos. Creo que todo tiene su límite y además es bueno que entre sabia nueva y esto se vaya remodelando indiscutiblemente. Esto tiene un costo personal muy importante y familiar. Acabado su etapa y se acabó. Es lo mejor.

P.- De la polémica con el cartel de Semana Santa, ¿qué es lo que más le ha molestado?

R.- Son circunstancias que se han producido, que hemos intentado soslayarlas lo mejor posible y de la mejor manera posible. Habrá quien esté de acuerdo y quien no. Hemos puesto sobre la mesa todas las posibilidades y se ha decidido seguir adelante y listo. Es cierto que se han dado unas circunstancias extrañas y raras. El cartel puede gustar o no, la cuestión es que se haya utilizado en parte un boceto que por lo visto ya era público, bueno parece que ha causado ese malestar. Agua pasada no mueve molinos y olvidado. Y aprender para el año que viene.

P.- ¿Qué le gustaría que se hiciera antes de marcharse?

R.- Me gustaría que nos autorizara a ampliar la Tribuna de Ganivet lo que supondría aliviar la lista de espera de palcos y generar algo más de ingresos para las hermandades. Si consiguiésemos además tener una mejor sede para la Federación ya sería lo suyo. Son cosas que se han quedado en el tintero y no se han podido conseguir. Espero y deseo que algo se pueda conseguir y si no dejemos los espartos puestos para que la próxima Junta de Gobierno de Federación pueda llevarlos a cabo.

Publicidad

Comentarios

©Queda totalmente prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta noticia sin autorización expresa de la dirección de ahoraGranada
Publicidad
DÍA A DÍA
Desarrollado por Neobrand
https://ahgr.es/?p=176249