Una despedida enclaustrada
El Domingo de Resurrección cumple también los augurios de otros cuatro días de la pasión e impide la salida de las tres hermandades de la jornada
Dicen que lo que mal empieza, mal acaba y la Semana Santa de Granada puede hacer justicia a la terminología popular para referirse al Domingo de Resurrección, en el que ninguna de las tres hermandades de la jornada pudo efectuar su salida.
La lluvia, que durante toda la madrugada ha caído con insistencia, no ha dado tregua a ninguna de las corporaciones nazarenas, a las que quizás se ha brindado la oportunidad de tener que tomar la decisión estando tomada, sin necesidad de dudar entre partes meteorológicos.
En cualquier caso, las cofradías convocaron a sus respectivos cabildos, aunque solo fuera por una cuestión protocolaria, para sellar en el acta la suspensión de sus estaciones de penitencia, siendo Los Facundillos la primera de ellas que tuvo que tomar la decisión.
La Cofradía de la Cañilla ya había contemplado qué hacer en caso de que no pudieran efectuar su salida hasta la Santa Iglesia Catedral y procesionó con el Facundillo y los niños en el interior de Santa Cruz la Real, algo que hacía casi dos siglos que no ocurría.
En cuanto a los pasos de las hermandades del día que iban a realizar su estación de penitencia, en el Zaidín el agua cayó ininterrumpidamente para dejar en bandeja la opción de suspender la salida del que hubiera sido el último palio de la Semana Santa de Granada.
Resurrección y Triunfo tomó la decisión en apenas unos minutos para recogerse en el interior de San Miguel Arcángel, haciendo vida de hermandad y tratando de vivir el último día de la pasión de otra manera, cerca de sus titulares, que tendrán que esperar a 2025, cuando entonces cumplirá cuatro décadas la cofradía.
Es el mismo tiempo que cumplirá la Hermandad del Resucitado del Regina, que desde el Sagrario también tuvo que conformarse con suspender su salida debido a las inclemencias meteorológicas.
Los más pequeños hicieron sonar las campanas en el interior del templo, donde también sonó la Banda del Despojado para tratar de quitarse la espina en este último día de la pasión.
Granada despide la Semana Santa en la que solo nueve hermandades salieron a la calle y solo ocho lograron completar su estación de penitencia hasta la Catedral, números que en la historia reciente no se conocían.