Luna creciente (Cuatro grupos aliados para once contrincantes) (9-6-2015)
Cuatro grupos aliados para once contrincantes
En un rincón oscuro, en ese sitio que se llama el gallinero, el infierno, el palomar o ni Dios sabe como se llama, los once contrincantes conservadores están con los guantes de boxeo puestos. Son la noble y leal oposición granatensis. Y en los lugares privilegiados y nobles, en las zonas VIPs, en los despachos rococó tan deslumbrantes en los que se gobierna y administra al populacho, están los concejales de cuatro formaciones políticas distintas: cuatro conservadores y doce rojazos variopintos. La repera en un dulce caldo tan agrio y ácido como un cuatripartito político que gobierna y administra a la plebe desde la Casa Bailía, esa sita en la bellísima Plaza del Carmen. La rehostia en LAC. O como Sancho Panza gobernó la maravillosa e ingeniosa Ínsula de Barataria. Y sin la ayuda inestimable de Alonso Quijano. Ya están a la venta, las entradas para los Plenos Municipales. Y también unos abonos para ver todo el año los combates boxísticos en los que los conservadores se pueden llevar más hostias políticas que pelos tiene en la cabeza un ex Corregidor que usó el método numantino de nones es a cojones como cojones es a palomar, gallinero e infierno con oposiciones. Mi abuelo decía, que para lo que nos queda de estar en este convento, es mucho mejor que nos caguemos dentro. Perdonen ustedes las expresiones coloquiales, pero al pan es mejor llamarlo pan. Y con respecto al vino, el vino siempre es vino. Un cuatripartito o un tripartito puede ser como un maravilloso “Frente Popular” que no es conservador. O sí. Aunque conociendo a esta Granada de nuestras culpas, todavía no desechamos que los conservadores se unan, once y cuatro, y solo queden doce rojazos variopintos en la noble y leal oposición. Mandar debe de ser la trihostia o cuatrihostia. Y cobrar los sueldazos, aún mucho más.
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