Luna creciente, martes 11 de marzo
No es de recibo que el PP lleve al Parlamento de Andalucía una Proposición no de Ley para promover que se aumente el precio de la entrada de visita pública a la Alhambra, y para destinar este aumento a la conservación y puesta en valor del patrimonio del barrio del Albayzín. Es de recibo, seguro, que parte del dinero de la entrada de visita pública ya existente se destine al barrio del Albayzín, y porque la UNESCO es muy factible que le retire al Albayzín lo de Patrimonio Mundial de la Humanidad que le concedió en el año 1.994, y porque este barrio está abandonado a su suerte por parte de uno y de otro. Y ese uno y otro no son más que el Ayuntamiento de Granada y la Junta de Andalucía. Ya hemos escrito muchas veces sobre el barrio del Albayzín, y conocemos que al municipio de Granada y a la Junta de Andalucía les da igual que se escriba un millón de artículos pidiendo consenso entre ambas instituciones para que se remedie todo lo especifico con el barrio del Albayzín. Pero el Albayzín, desgraciadamente, no es nada más que otra confrontación Ayuntamiento-Junta de Andalucía, una más de las que ambas instituciones tienen abiertas, y porque al PP y al PSOE, el bipartidismo, lo que le interesa es gobernar y administrar y no llegar a los consensos racionales que deben de existir entre instituciones de diferente signo político para garantizar que se gobierna y se administra a favor del pueblo soberano y no a la conveniencia del partidismo político y sus partidistas ideologías quizá ya trasnochadas y obsoletas. ¿Qué hay que hacer o qué hay que pedir encarecidamente para que se salve el barrio del Albayzín y la UNESCO no le retire lo de Patrimonio Mundial? Modesto servidor, lo pide con toda humildad.
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