¿Oiga? (Tictac) (2-2-2015)
Tictac
Parece que suena un reloj. Tictac. Tictac. Tictac. Un reloj que lleva funcionando más de 35 luengos años en este país (España). Es un reloj alternante que lleva andando en la muñeca del bipartidismo, quizá una muñeca derecha y otra izquierda o quizá las dos muñecas de derecha, ya demasiados años uno detrás de otro. Y la corrupción política y empresarial como dos caballos desbocados. Y la nueva casta sacerdotal política que se creó con la Transición, como caciques antiguos con derecho a toda clase de pernadas, prebendas, lujos y putadas. Tictac. Tictac. Tictac. Reunir en pocas calles a cien mil personas, a doscientas mil personas o a trescientas mil personas, es difícil de conseguir. Este es un país sin las revoluciones imprescindibles para ser un buen país democrático con memoria política y con concienciación social de una sociedad civil que sirve para algo en lo político, social, económico y cultural. ¿Oiga: ¿Ha llegado el momento exacto del tictac que pone orden y erradica a un antiguo régimen, por muy democrático que sea, ya obsoleto y con olores a alcanfor? Aquí en este país nos hace falta más democracia y más demócratas. Gentes con honor, honestidad y honradez en los cuatro puntos cardinales de sus personales escalas de valores. Y también hace falta que el personal folle más y mejor. Y que tenga trabajo. Y que sea igual ante la Ley. Y que no nos cuenten nunca más mentiras falaces. Eso.
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