La ansiedad de los puestos de descenso, un riesgo añadido
En las cuatro ocasiones que el Granada bajó, el equipo estuvo más de la mitad de jornadas en los últimos puestos · En lo que va de Liga ya ha alcanzado el 44%
El Granada CF tiene que salir de la quema cuanto antes para quitarse la ansiedad. Foto: LOF
Solo quedan once jornadas para que el Granada CF evite el descenso de categoría y para ello sabe que tendrá que 'remar' duro en la dirección contraria hacia la que lo empuja la marea de Segunda División. Manejar la ansiedad en los puestos de peligros es un riesgo añadido que los futbolistas tendrán que saber controlar si no quieren el fatal desenlace en mayo.
De hecho, la historia no habla muy bien a favor de la actual plantilla rojiblanca. El Granada CF ha bajado en hasta cuatro ocasiones a Segunda División, de las cuales los números dicen que en dos de ellas lo hizo ocupando puestos de descenso directo en más de la mitad de jornadas del campeonato, aunque en la última ocasión que el equipo bajó solo estuvo dos jornadas en peligro, las dos últimas, y cayó al pozo.
Diez temporadas sin pisar el peligro
El Granada CF sin embargo ha demostrado cómo en ocasiones las campañas se le han dado bastante mejor. Así, de las 21 temporadas que ha jugado en Primera, diez de ellas los rojiblancos no pisaron los puestos de peligro en una sola jornada. En ninguna de ellas bajó a excepción de la campaña 66-67, donde jugó la promoción a Segunda y descendió. La última vez que el Granada estuvo sin pisar los puestos de descenso fue con Lucas Alcaraz, la pasada campaña. El técnico granadino y granadinista nunca estuvo en la quema en ninguno de los 51 partidos que dirigió al frente del Granada CF.
Así las cosas, el equipo granadinista ya ha superado el 44% de las jornadas en puestos rojos de la clasificación, con hasta una docena en su haber, dos más que la cifra más elevada desde el retorno a Primera División. Hace dos campañas, el Granada CF, también dirigido por Abel Resino a estas alturas de la temporada, ocupó puestos de descenso directo diez jornadas y terminó por salvarse.
Pero en esta ocasión se produce una casuística negativa y es que las doce jornadas que los granadinistas llevan en peligro, que podían haber evitado este sábado de haber ganado en Vallecas, todas han sido consecutivas, con lo que la ansiedad se convierte en una amenaza seria para que los futbolistas vean el bosque detrás de los árboles.
En la campaña 44-45 se produjo el primer descenso de los granadinistas a Segunda División. Entonces, en una liga corta, de solo 14 equipos, los granadinistas ocuparon en hasta 17 jornadas los puestos de peligro (el 65% del total).
Quince años más tarde el equipo pasó por el mismo trance. Entonces el Granada CF bajó tras haber ocupado en 17 de las 30 jornadas los puestos de descenso directo (el 56%), siendo esta la peor campaña con diferencia de los rojiblancos en Primera con doce partidos como colista, posición en la que terminó al final de Liga.
Los otros dos precedentes, sin embargo, son la excepción que confirman esta regla. Así las cosas, el Granada CF descendió en la campaña 66-67 después de no haber estado en puestos de descenso directo ni una sola jornada. El drama se dio cita en Granada tras jugar la promoción a Segunda, puestos que el equipo ocupó en 18 de las 30 jornadas.
Por último, los granadinistas también cayeron en la campaña 75-76. Entonces el descenso llegó en las dos últimas jornadas, que fueron las que los rojiblancos ocuparon en peligro (el 5,88%). El drama después de la mejor etapa en Primera se constató y el Granada tardó 35 años en volver.
