Otro paso del Granada CF hacia el abismo
Los de Alexander Mediina pierden en Getafe fruto de su incapacidad y falta de hoja de ruta para competir y luchar por la permanencia
El Granada CF ha dado este lunes otro paso más hacia el abismo de la Segunda División. El equipo rojiblanco ha perdido 2-0 en el Coliseum ante el Getafe, en un partido falto de ideas plan y capacidad de los de Alexander Medina en la primera parte y una segunda parte maquillada a base de ocasiones creadas por el puñado de versos sueltos en lo que se convirtieron los jugadores granadinistas.
Matías Arezo, como se esperaba, fue el hombre titular en sustitución de Lucas Boyé. Fue el único cambio respecto a los once que empezaron el partido ante el Atlético de Madrid, pero la actitud de los rojiblancos fue bien distinta que en los dos últimos encuentros.
El peligro en las botas lo llevó siempre el Getafe en la primera parte, con acciones en los minutos ocho y nueve de partido. La primera de ellas fue obra de Greenwood con un disparo desviado que Neva envió al córner. Después Batalla tuvo que esmerarse para evitar el gol, en una acción que comenzó en un centro de Martin buscando la cabeza de Mayoral. El delantero cabeceó picada abajo y se topó con la acertada pierna del argentino.
Lo que demostró el Granada CF es no tener un plan claro de partido, algo que sí dejaron los de Bordalás, que incidieron hasta que encontraron recompensa a los 20 minutos. Greenwood recibió un balón en el centro del campo en el cambio de orientación del ataque y logró zafarse de un Villar inofensivo hasta que encaró en el vértice. Su centro se convirtió en un disparo cuando tocó primero en Neva y después en Ignasi Miquel, para desviarla y despistar a Batalla, que no pudo hacer nada por evitarlo.
Lejos de reacción granadinista, el Getafe olió el miedo de los de Alexander Medina y empezó a aprovechar y provocar imprecisiones que por momentos resultaron obscenas. Fue así como solo quince minutos después del gol del Getafe llegó el tanto con el que el partido quedaría sentenciado. Sergio Ruiz cedió un balón a Batalla, quien resbaló. Lejos de despejarla o intentar cogerla con la mano aunque supusiera cesión, optó por empecinarse en el balón jugado, algo que Mayoral aprovechó para robarla y llevarse el 2-0 definitivo.
A partir de ahí la película del partido del Granada CF se puede buscar en varios frentes. Por un lado, el de Alexander Medina, de quien comienza a preocupar la incapacidad manifiesta para saber mover el banquillo cuando es necesaria la reacción del equipo. Ocurrió en el descanso, donde optó por no mover nada y esperarse a unos minutos después del paso por vestuarios.
La entrada de Melendo pareció dar otro aire a los rojiblancos, que incluso en una acción aislada lograron un penalti con la ayuda del VAR que sin embargo Myrto Uzuni envió al palo y privó de meterse en el partido. La reacción granadinista fue creciendo hasta quedarse a medio gas.
Las llegadas del Granada CF no terminaron de concretarse, volcándose en el ataque con disparos de Ricard, Bryan, Melendo, Villar e incluso Ignasi Miquel, pero ninguno de llos vio la portería deseada, a excepción de un remate de Melendo que desvió Soria a córner.
De ahí al final del partido quedó constatado que este Granada CF no tiene plan establecido ni brújula que pueda enderezar el rumbo. La mejoría en el segundo tiempo no puede justificar la incapacidad para parecer, ser y estar en la lucha por la permanencia.
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