Luna creciente (A chiri pu) (16-7-2015)
A chiri pu
El periodista A chiri pu, es aquel que tiene montada una escalera para trepar en su sesera. Es el periodista que trepa o escala por las vertientes escarpadas para llegar a ser un lameculos perfecto. Es el periodista que no conoce el honor, la ética ni la deontología profesional. Y además, escribe regular tirando a mal. Aunque es el número uno en saber beber vinos carísimos en chatos, pasar las manos por los lomos y cepillarse, vulgo follarse, a todas aquellas políticas, sobre todo de las derechas inmortales, que están aquejadas de escasez amatoria o mal de amores. Es aquel profesional que usa su lengua para denigrar y su pluma para informar sesgadamente. Un hijo de puta trepador. Pero que vive como Dios Padre porque trinca en su cazo de aquellos que lo compran con vil metal para salir bien de los entuertos políticos y periodísticos. El periodista A chiri pu, desde siempre, ha sido un enano con la malaleche de un gigante. Y es un vilipendiador de todos aquellos, sobre todo políticos, que no son de su agrado porque no le caen simpáticos, porque no cobra o porque no tiene empatía con ellos. Este periodista es diestro en hacer la bola o la pelota a sus jefes. Y para llegar al estrellato periodístico o al establo de las vacas sagradas periodísticas. En definitiva, es un pobre hombre. Y porque existen los hombres pobres y los pobres hombres, y el A chiri pu es de los segundos. Y así camina el periodismo en este país de lentejas e ideas más duras que el duro corindón.
