Luna creciente (El periodismo con futuro) (14-10-2014)
El periodismo con futuro
El buen periodismo no es más que decir o escribir la verdad de lo que acontece a diario y de lo que se investiga coyuntural o estructuralmente. El buen periodismo no debe de tener ningún amigo. Y hay que apoyarlo, leyéndolo y escuchándolo, para que pueda salir victorioso todos los días frente al capital que intenta hacer que el buen periodismo no pueda ser libre e independiente porque los patronos solo buscan ganar muchísimo dinero. Argumentó Napoleón Bonaparte, fascista él, que “el cañón mató al feudalismo y que la tinta matará a la sociedad moderna”. Es al revés. Y porque sin buen periodismo la sociedad moderna y posmoderna es timada y engañada y desinformada todos los días por los grupos económicos de presión y por sus adlátere y gregarios partidos políticos. Sin buen periodismo, no nos cansamos de referirlo, no puede existir la democracia en la que se puede formar, por ejemplo, un Estado Social de Derecho como el que dicen que existe en nuestro país (España), pero que aquí falla más que las escopetas de las ferias de los pueblos maravillosos de esta piel de vaca o quizá de toro. También ha aducido en México el señor Cebrián, don Juan Luis, periodista, que “el periodismo tiene futuro, pero debe de reinventarse”. Pues no es así. El buen periodismo ya está inventado. Y lo que hay que hacer es simple: hacer buen periodismo. Y lo del futuro se dará como consecuencia de ese buen periodismo. ¿Se escribe el “qué”, el “cómo” y el “cuándo” sin que medien los intereses económicos, los intereses políticos y los intereses que se generan con los amiguismos que hacen que algunos sean intocables? No. No se escribe así en España. Se escribe con un amo omnímodo que revisa y censura lo que hay que leer, ver y oír.
