"A una madre no se la abandona cuando te necesita y mi madre es el Granada"
Lucas Alcaraz se despide del conjunto rojiblanco después de sellar la permanencia en Primera por segundo año · El técnico agradece a todos los aficionados, incluidos los más críticos
"A una madre no se le abandona cuando te necesita y mi madre es el Granada CF". Ésta ha sido la frase con la que Lucas Alcaraz ha puesto punto y final a su etapa como entrenador del conjunto rojiblanco, después de año y medio en el que ha conseguido sellar la permanencia dos temporadas consecutivas.
En una sala de prensa abarrotada, el ya extécnico granadinista ha leído un comunicado para desepedirse definitivamente de todos que le han acompañado en esta etapa, entre ellos los aficionados, trabajadores del club y directivos. Precisamente han sido a estos a los que más palabras ha dedicado, entre ellos al presidente, Enrique Pina, y al director deportivo, Juan Carlos Cordero, a los que ha tenido palabras de afecto por mantener las distancias pertinentes para que todos pudieran trabajar "con profesionalidad".
El entrenador ha asegurado que el pasado domingo decidió comunicar a Pina y Cordero su decisión de abandonar la entidad después de 55 partidos, en los que ha conseguido dejar fuera de los puestos de descenso directo. Antes del choque, solo era su esposa la que conocía dicha decisión.
La decisión la toma "por coherencia" ya que en el fútbol hay que serlo y pensando "en el beneficio del club, como abonado y como granadinista". "Un ciclo se cierra", ha explicado Alcaraz, que ha recordado que su etapa comenzó en febrero de 2013 antes del partido ante el Real Madrid y concluyó el domingo en Zorrilla: "El banquillo necesita una cara nueva".
"El desgaste de 55 partidos o dos permanencias en las últimas jornadas" han sido en parte los motivos que han fundamentado la decisión habiendo vivido unas últimas semanas "muy intensas" en las que ha recibido más apoyos que en toda su carrera deportiva.
Ha anunciado también el adiós de su "mano derecha", Jesús Cañadas, que "ha trabajado en la sombra" y del que tiene una gran "valoración" así como "el máximo reconocimiento".
Ha tenido palabras de recuerdo para su abuelo o su suegro y ha reconocido que "es difícil juntar la profesión con la pasión". "Mi hijo ha empezado a vivir en Granada a los ocho años, por suerte somos conscientes de lo que supone, me alegro que mi hijo haya vivido lo que yo y mi abuelo vivimos en mi infancia", ha manifestado.
A la afición le ha agradecido el apoyo al equipo y ha dicho que "siempre" será su afición pese a los momentos malos, añadiendo que quienes piensen que se va enfadado con los críticos "es porque no me conoce".
A su juicio, Pina ha sabido dar el cariño necesario al entrenador, a la par que ha reconocido su labor en Granada porque en el fútbol "sí es posible construir la casa por el tejado" y en en este caso "por suerte y por conocimiento llegaron los resultados", aunque ha recordado que "los saltos rápidos en el fútbol necesitan digerirse".
Ha partido una baza a su favor al asegurar que "nadie tenga dudas de que tomará las decisiones oportunas para la primera plantilla" y ha manifestado que la afición necesita de Pina y Pina de la afición para que "todo sea un éxito". A Juan Carlos Cordero le ha agradecido la oportunidad dada así como "la calma en momentos difíciles", su rigor y dedicación y ha augurado que el equipo este año "seguirá creciendo".