Planagumà, en el sendero de Joseba Aguado
Al igual que le ocurrió al granadino cuando dirigia al filial, debutará en Primera División en su puesto de interino · "Tiene a su favor que juega en casa", dice Aguado
Joseba Aguado saluda al Cholo Simeone en el partido que los enfrentó en la jornada 19 de la temporada 2014/15. Foto: LOF
Después de más de 14 jornadas sin conocer la victoria y una estrepitosa goleada en el Sánchez Pizjuán durante los octavos de final de la Copa del Rey, Joaquín Caparrós puso punto y final a su etapa en el Granada CF, quedando las riendas del equipo, a solo cuatro días de jugar ante el Atlético de Madrid, en manos de Joseba Aguado, entrenador del filial.
Este escenario es similar al que esta semana le ha tocado vivir a Lluis Planagumà. Como Aguado, debutará en Primera División en una situación interina a la espera de que llegue el nuevo inquilino del banquillo rojiblanco, aunque en lugar de hacerlo en el Calderón lo hará en Los Cármenes y en lugar de enfrentarse al Atlético de Madrid el rival será el Leganés.
En declaraciones a ahoraGranada, Joseba Aguado ha recordado aquella experiencia que para ellos tenía "una ventaja" respecto a la situación que afronta el hoy entrenador del Granada B y accidental inquilino del banquillo del primer equipo: "Llevábamos cinco años en el club, mi segundo era David Tenorio y en la primera plantilla había jugadores del filial. Los veteranos nos conocían".
Del mismo modo, otro de los puntos con los que contaba era con unos sentimientos que iban en rojo y blanco y en horizontal. Fue de esto de lo que, recuerda Aguado, tiraron en el vestuario para tratar de afrontar el primer partido 'post-Caparrós' con las mejores garantías posibles. "Solo dimos tres aspectos tácticos defensivos y ofensivos, sabíamos que nos enfrentábamos al actual campeón de Liga y la actitud del equipo fue enorme", ha recalcado el entonces entrenador del segundo equipo.
De hecho, para afrontar dicho encuentro, él y su segundo de a bordo durmieron poco los días previos al partido, principalmente con la finalidad de preparar cuantos vídeos necesarios que resumieran lo que querían que los jugadores practicasen sobre el césped. Antes de ello tiraron de la ilusión, de los ánimos, de la afición y del aspecto anímico, sobre todo para demostrar que "el equipo podía estar perfectamente, dar la cara como así se demostró".
La reacción de plantilla y dirección deportiva
A su llegada, recuerda Joseba, la colaboración de la plantilla y de la dirección deportiva del club fue total. Pero ante todo, su cuerpo técnico intentó implantar el "gen ganador" que entonces tenían en el filial e inculcar en los jugadores del primer equipo "ese apetito de victoria".
"Y de hecho el equipo compitió ante el Atlético de Madrid, luego un penalti cambio la balanza", asegura el entrenador entonces, que además tiene buenos recuerdos de aquella experiencia porque aún hay jugadores, que ya no están en el Granada CF, que les recuerdan aquellos días "por impartir el gen ganador, la ilusión y los aspectos tácticos".
Los días previos al partido, Aguado y su equipo recibieron el arropo tanto de Quique Pina como de Juan Carlos Cordero, presidente y director deportivo respectivamente; a quienes tenía informados de todo cuanto decidía.
"Además el primer día me dieron un informe de todos los sectores de la plantilla, pero nadie me obligó ni nadie me dijo cómo tuve que actuar, estuve arropado en todo momento", ha indicado el ya exentrenador del Granada B, que ha destacado como aspecto a su favor el conocer el funcionamiento del club y de los profesionales, lo que le generó una sensación de "tranquilidad".
A su sucesor en el cargo, que imitará la misma situación este sábado, además de desearle suerte considera que tiene a su favor jugar en Los Cármenes, por lo que "es probable que el partido lo gane sola la afición", cuya ayuda, ha destacado, es "primordial".
