Relato de la pasión granadina hecha verso
Manuel Alejandro Amador Moya protagoniza un pregón cargado de emoción en el que emplea el evangelio como hilo conductor de una historia que incluye todos los titulares de la Semana Santa de Granada
La Semana Santa de Granada ya está pregonada. Manuel Alejandro Amador Moya ha pronunciado este domingo, como cada primero de Cuaresma en la ciudad, el discurso más importante de la pasión, cargado de emotividad y sobre todo con un relato en el que los versos han sido protagonistas para componer un todo con el evangelio como hilo conductor.
Durante hora y media, este cofrade 'esperanzo' ha tenido muy presentes algunos recuerdos de su niñez, pero también ha sabido ir dando cabida a momentos que protagonizan la pasión granadina, vivencias que todo cofrade conoce de Domingo de Ramos a Domingo de Resurrección.
Precisamente, todas las imágenes que son titulares de las distintas hermandades han protagonizado también el pregón de la Semana Santa de Granada, hecho desde el corazón de un cofrade que solo se ha emocionado en dos ocasiones.
En la primera de ellas no ha podido contener las lágrimas para recordar a su madre y referirse a la Virgen de la Victoria: "Escucha a este pregonero / lo que dicen sus palabras / cuando tus males te aflijan / y se hunda tu mirada / llégate a Santo Domingo / que no hay doctora más santa / que la Victoria infinita / con palio y con bata blanca".
El otro momento en el que el pregonero rompió a llorar fue justo al acabarse su intervención, con el aplauso de un Teatro Isabel la Católica repleto, después de dedicar el último de los 14 capítulos, como estaciones de un vía crucis, a la Resurrección y, sobre todo, a la Virgen de la Esperanza.
"La Esperanza es lagrimal / cuando las puertas se cierran / y vas descontando días / porque regrese esa fecha / Esperanza, Esperanza / tu nombre todo lo llena / como llena este teatro / y la sangre de mis venas / por ti se acaba el pregón / recordando esta alabanza / bendito siempre tu nombre / señora de la Esperanza", ha concluido.
Pero antes de todo esto, en la intervención del pregonero ha habido cabida para todo. Su pronunciamiento lo ha comenzado dedicándoselo a la Virgen de las Angustias, la Patrona de Granada, pues ante ella se postró "siendo tan solo un niño y desde esa atalaya fui creciendo y contemplando la maravillosa historia de la salvación del hombre".
A partir de ahí ha ido repasando todo el evangelio, por materias vinculadas a la vida, obra, muerte y resurrección de Cristo. Por momentos el pregonero ha tenido la capacidad de pronunciar su discurso sin mirar un guión en el que ha introducido sobre todo versos.
La Concha como "señora argéntea y añil", la Encarnación como recuerdo de que "la salvación está en marcha", o las Maravillas como "perla del Darro y virgen pura sin mancilla" han sido algunos de los calificativos empleados sobre algunas imágenes titulares.
"Del milagro de la Magdalena cada Lunes Santo convertida en Río Jordan a la gloria de la transfiguración del hijo de Dios, así es la primavera granadina", ha dicho el cofrade para pasar de la Hermandad del Rescate a la del Cautivo.
Para Manuel Amador la Semana Santa es una "ciencia inexacta" que sale "perfecta", una "ecuación imprecisa que da muy buen resultado. Algo que impacienta y sacia a la vez. Un retiro para los sentidos y un oasis para la oración, donde el silencio es muy importante pero la música es celestial", ha añadido.
Amargura, Paciencia, Perdón o Humildad han protagonizado otro capítulo dedicado a "los ojos del señor", mientras que la Hora Nona también ha tenido su apartado especial para abordar lo que siente Granada cada Viernes Santo a las tres de la tarde: "Granada tiene un reloj / que se detiene al instante / que el Viernes Santo señala / que son las 3 de la tarde".
La "contemplación" ha estado dedicada a los cristos granadinos como Misericordia, Consuelo, Buena Muerte o Redención, y Santa María de la Alhambra ha formado parte de otro capítulo en el que el pregonero ha reconocido tener "debilidad" por una "morena de manto rojo", la Virgen de la Misericordia.
La 'Rosa Mística' ha incluido en la intervención a Alegría, Paz, Consolación, Caridad, Reyes, Remedios, Mayor Dolor, San Jerónimo, Soledad y Soledad en el Calvario, de las que ha dicho que "aquel rosal de la Alhambra / que alumbró a la luz del día / y que guarda entre sus rosas / tus santos nombres, María".
El único momento sonoro del pregón lo ha empleado con el tema 'Pasan los campanilleros' interpretado por la flauta travesera de José Manuel Franco Amador, con el que entre su intervención y cierre ha dado oficialmente la bienvenida a una nueva Semana Santa. Ahí queó.
