El diccionario Lasarte
Revolución lingüística. Ha estado aquí. Nos ha honrado con su presencia el ministro de Justicia, Valentín Lasarte, quien ha acudido a la amable invitación de asistir a un foro amable organizado por un medio de comunicación granadino de complicidad ideológica y promesa de trato amable, o sea sin preguntas molestas, insalubres y peligrosas sobre la Gürtel, las black, los Blesa, Bárcenas o esa responsabilidad de ser beneficiario, caso Mato, del PP. De eso nada. Siempre lo digo, y es que para estar informado hay que saber de qué no se informa, porque algunos medios pecan, sobre todo, de omisión. Lo mejor es que Lasarte ha revolucionado el diccionario de la RAE, la Academia de Jurisprudencia y las instituciones relacionadas con la cosa de la lengua, porque ahora no se ‘es imputado’ sino ‘investigado’. Todo un cataclismo para la noble lengua española, porque ya podremos decir que hacemos una imputación privada, o sea una investigación privada. Incorrecto, porque no es reversible el tema. Un imputado es ‘un investigado’, y punto. Eufemismos, camuflajes, cortinas de humo, falsedades, postizos y demás pócimas y artimañas para transmutar la realidad y generar confusión. El éxito está garantizado ante una gran masa de población analfabeta funcional. Sí, saben leer, pero hay mucha gente que no sabe lo que lee.
Operación Ciutadans. La operación perfecta, de libro, la que ya señalaran los foros en la prensa internacional, como la de Canadá, donde se encuentra el amigo Manuel Tapial, quien ya advirtió de que a PPSOE le interesaba Ciutadans como tercero. No lo podrían haber hecho mejor. Un partido completamente desconocido en Andalucía, con un nombre original en catalán, lo que escuece aún más dada la rivalidad histórica andaluz-catalán, y se aventura como bisagra del PPSOE. Enhorabuena a los estrategas, y muy mal por los compatriotas. ¿Realmente saben mis compatriotas andaluces la línea programática de Ciutadans? ¿Qué programa tiene para Andalucía? ¿Nos pondrán un plato de boquerones o nos darán las redes para pescarlos? El voto es libre, pero es imposible que la población andaluza haya asimilado con garantías de conocimiento las líneas programáticas e ideológicas de ese partido, y ni falta que les hace para votarlo. Hay que tener responsabilidad en lo que se vota, para saber aquello de que después de la tempestad llegaron estos lodos. Los pueblos tienen lo que se merecen y las urnas solo reflejan el carácter de ese pueblo. No nos andemos con más teorías políticas y discursos vacuos. Habrá un cambio de siglas y pasaremos de PPSOE a PPSOEC, o sea Partido Popular Socialista Obrero Español de Ciutadans, y olé.
Las promesas de Alonso. El gran Luciano Alonso, la mano derecha de Susana Díaz, esa que dicen se quedará al frente de Andalucía cuando la presidenta se lance en busca de la presidencia del Gobierno de España, ha prometido (redoble de tambor, por favor), la apertura del Centro Lorca. Sus compañeros del PP advierten de que no será porque haya llegado el dinero de la Junta. Es clara la intención de Luciano de suprimir, a través de la muerte lenta y agónica por falta de recursos, algunas instituciones culturales granadinas, y ahí está la misma OCG. En una de sus visitas a la formación orquestal hizo preguntas como que cuántos músicos se precisaban para la orquesta. En cuanto a la Casa de los Tiros, que también tiene hemeroteca, vio suprimida su suscripción a ese periódico local que tanto le luce a Luciano. Paradojas de la cosa político-mediática. Por cierto, habría que preguntarle a Luciano qué pasó con su propuesta para traer desde Colliure a Sevilla los restos de Machado. La respuesta se encuentra en la ‘excelente’ acogida de la iniciativa entre los colectivos republicanos y de memoria histórica. Y es que en esto de la cosa cultural hasta los muertos bien valen para apuntarse un tanto mediático-político. No lució mucho el tema Luciano, pero ya estás más cerca de la presidencia.
